Nuestra historia
La Fundación Misiones Urbanas nació en Pereira como el brazo extendido de la obra social de la Iglesia Comunidad Cristiana de Fe, con un propósito sencillo pero arraigado en los principios bíblicos: estar cerca del necesitado, alimentar al que tiene hambre, acompañar al que sufre y levantar al que está en vulnerabilidad, tal como hemos sido llamados a hacerlo.
Sus primeros pasos fueron dados por un pequeño grupo de personas movidas por la fe cristiana, que comenzó visitando barrios para entregar alimentos, escuchar a las familias y brindar acompañamiento espiritual. Lo que inició como un acto sencillo de amor pronto se transformó en un movimiento comunitario cuya fuerza y alcance hicieron evidente la necesidad de formalizar el trabajo.
9 de agosto de 2011, ese sueño tomó forma oficial como la Fundación Misiones Urbanas, conservando su esencia: servir con dignidad, acompañar con amor y fortalecer a las familias desde lo espiritual, lo emocional y lo social. Hoy, nuestra labor se desarrolla a través de tres frentes que se complementan entre sí para ofrecer una respuesta integral a las comunidades que atendemos:
Asistencia social
Transformando comunidades
REVER
«La Fundación Misiones Urbanas es el brazo extendido de la obra social de la Iglesia Comunidad Cristiana de Fe, con un propósito sencillo pero arraigado en los principios bíblicos: estar cerca del necesitado, alimentar al que tiene hambre, acompañar al que sufre y levantar al que está en vulnerabilidad, tal como hemos sido llamados a hacerlo.»
Trabajar por el bienestar integral de las comunidades más vulnerables de la ciudad, desarrollando proyectos sociales, educativos y espirituales que fortalezcan a las familias, promuevan valores y generen oportunidades de crecimiento. A través del servicio, el acompañamiento y el trabajo con voluntarios, buscamos transformar vidas, impulsar el desarrollo comunitario y contribuir a la construcción de una ciudad más humana, solidaria y esperanzadora.
Ser un referente de unidad y servicio, formando a los niños, acompañando a las familias y promoviendo sanidad emocional y espiritual para su crecimiento integral.
Servicio
Actuamos con disposición y entrega para apoyar a quienes enfrentan situaciones de necesidad, llevando ayuda, acompañamiento y esperanza.
Solidaridad
Promovemos el apoyo mutuo y el trabajo colectivo, fortaleciendo lazos comunitarios y alentando la participación de voluntarios y familias.
Amor y compasión
Guiamos nuestro trabajo desde el respeto, la misericordia y el amor al prójimo, brindando atención digna y cálida en cada encuentro.
Integridad
Actuamos con transparencia, responsabilidad y honestidad en cada acción y proyecto que emprendemos.
Fe y espiritualidad
Basamos nuestras acciones en principios cristianos que inspiran esperanza, fortalecen a las familias y orientan la toma de decisiones.
Inclusión
Reconocemos el valor de cada persona y promovemos espacios donde niños, niñas, jóvenes y familias puedan participar y desarrollarse sin distinción.
Transformación comunitaria
Trabajamos para generar cambios positivos y sostenibles en las comunidades, promoviendo hábitos saludables, liderazgo y crecimiento personal.
Objetivos a largo plazo
Consolidar un modelo integral de intervención comunitaria que fortalezca a niños, niñas, familias y comunidades vulnerables de la ciudad, ampliando el impacto de nuestros programas educativos, sociales y espirituales. Buscamos establecer espacios permanentes de formación, apoyo y acompañamiento que promuevan el desarrollo personal, el liderazgo, la transformación de hábitos y la generación de nuevas oportunidades, contribuyendo a construir comunidades más sólidas, unidas y resilientes.
Nuestro equipo de trabajo
Soy Diana Corredor, Directora Administrativa de la Fundación Misiones Urbanas. Creo en el poder de servir, de cuidar y de transformar comunidades. Desde mi rol apoyo los procesos que permiten que cada niño, familia y comunidad reciba amor, alimento y oportunidades.
Soy Tatiana Martínez, Coordinadora de Voluntariado y Asistente Administrativa. Creo profundamente en el poder del servicio y en la fuerza de las manos dispuestas. Acompaño a nuestros voluntarios para que cada gesto de amor llegue a quien lo necesita y apoyo los procesos administrativos que hacen posible nuestra misión. Servir con alegría es mi manera de transformar vidas.
Soy Jessica Echeverry, coordinadora del proyecto de Asistencia Social. Mi corazón está en las comunidades y en cada familia que acompaño. Trabajo para que el alimento, la ayuda y el apoyo lleguen con dignidad, amor y oportunidad. Mi misión es tender puentes de esperanza y asegurar que ninguna necesidad pase desapercibida.
Soy Edyenny Galvis, coordinadora del proyecto Transformando Comunidades. Creo en el poder de la educación para transformar vidas, y mi misión es acompañar a cada niño y familia para que encuentren en nuestros programas un espacio seguro donde aprender, crecer y soñar.
Nuestra Junta Directiva, acompaña, guía y respalda cada paso de la Fundación Misiones Urbanas. Con visión, integridad y un profundo compromiso con el servicio, lideran los procesos estratégicos que permiten que nuestra misión avance y que cada programa llegue a quienes más lo necesitan.
Nuestros voluntarios, son el corazón que mueve todo lo que hacemos. Personas que entregan tiempo, amor y servicio para transformar comunidades. Gracias a ellos, cada alimento, cada clase, cada abrazo y cada gesto de esperanza llega a los lugares y personas que lo necesitan.
